«Almería al paso», exposición fotográfica de Carlos de Paz
La fotografía de calle es una de las especialidades que implica una mirada directa y atenta, una práctica que obliga a encontrarse con la vida, a observar la huella de la humanidad. Esto muestra esta exposición inédita del madrileño afincado en Almería
Carlos de Paz. 50 fotografías en blanco y negro realizadas en formato analógico y digital entre 1996 y 2011 en nuestra provincia con su extraordinario ojo observador.
I T IN E R A N C I A 2 0 11
Carboneras – Centro Foro Abierto.
1 – 22 Junio de 9 a 14 y 16 a 21 h. (Sábados y Domingos cerrado)
Fiñana – Instituto de Enseñanza Secundaria.
24 Junio – 11 Julio de 10 a 14 h. (Sábados y Domingos cerrado)
Arboleas – Museo Pedro Gilabert.
13 – 27 Julio de 10 a 14 h. (Lunes Cerrado)
Alhama de Almería – Sala de Exposiciones Pintor Moncada Calvache. Otoño.
Este calendario puede sufrir modificaciones por imprevistos ajenos a la Diputación de Almería.
Carlos de Paz, 1953
Caminar despacio por la ciudad y los pueblos. Salir al encuentro del «azar objetivo», utilizar la cámara fotográfica como una pluma con la que escribir los sueños y realizar asociaciones mentales libres, sin la intromisión censora de la consciencia y de la razón. Dejarse sorprender por la vida misma, más allá –o más acá- de lo «noticiable», procurando que fluyan por la piel de asfalto, los sentimientos olvidados.
Como diría Julio Cortázar en su libro “Las Babas del Diablo” y que sirvió a Michelangelo Antonioni para realizar “Blow Up” :
“Entre las muchas maneras de combatir la nada, una de las mejores es sacar fotografías, actividad que debería enseñarse tempranamente a los niños pues exige disciplina, educación estética, buen ojo y dedos seguros. No se trata de estar acechando la mentira como cualquier repórter, y atrapar la estúpida silueta del personajón que sale del número 10 de Downing Street, pero de todas maneras cuando se anda con la cámara hay como el deber de estar atento, de no perder ese brusco y delicioso rebote de un rayo de sol en una vieja piedra, o la carrera trenzas al aire de una chiquilla que vuelve con un pan o una botella de leche”.