Cristales para todo un Imperio
Programa «“Las huellas de Roma en Almería”
Organizado por Amigos de la Alcazaba y Museo de Almería
El lapis specularis o yeso especular es una variedad de yeso selenítico que fue explotado en época romana para múltiples usos y utilidades. Se trata de un sulfato cálcico dihidratado (CaSO4·2H2O), que geológicamente aparece formando cristales de gran tamaño, con una excepcional transparencia, y que pueden ser fácilmente separados en láminas. Su aplicación más valorada fue, sobre todo, como acristalamiento de ventanales y vanos, haciendo las funciones de nuestro vidrio moderno. Otros usos de este mineral, derivaban de su empleo para la realización de estucos, molduras, y enlucidos, a partir de la obtención de yesos y escayolas de alta calidad, una vez que el mineral cristalino era sometido a deshidratación y molido.
La minería romana del lapis specularis desempeñó en los inicios del Imperio, durante los siglos I y II d. C., un papel destacado entre los materiales lapídeos demandados e incorporados en los programas arquitectónicos puestos en marcha en edificaciones como las domus urbanas, termas, bibliotecas, grandes villae, etc, especialmente por la necesidad de amplios ventanales que dejasen pasar la luz y el sol, al mismo tiempo que servían como aislamiento ante las inclemencias meteorológicas, permitiendo la visión exterior y asegurando el confort climático.
En la actualidad, el registro arqueológico de estos minados y yacimientos históricos, además de en España (con explotaciones mineras romanas de este mineral en las actuales provincias de Cuenca, Toledo y Almería), se documenta en Italia (en la región de Bolonia-Ravena y en Sicilia), así como en Chipre, en la Capadocia turca y en Túnez. Aún así, según el naturalista romano Plinio el Viejo (siglo I d. C.), las minas hispanas eran las más importantes del Imperio, y donde se obtenían los cristales de yeso de mayor calidad.
La investigación de la minería romana del lapis specularis se viene desarrollando ya desde hace más de dos décadas por un equipo multidisciplinar, con carácter internacional en los últimos años, en el que participan Arqueólogos, Geólogos, Ingenieros de Minas, Cristalógrafos y otros profesionales de diversas disciplinas, que garantizan una correcta intervención científica en estas minas. Así, junto al estudio arqueológico de los minados de época romana, se llevan a cabo diversas actuaciones y trabajos que comprenden, desde la identificación analítica de la procedencia mineralógica de las piezas de lapis specularis encontradas en contextos arqueológicos de yacimientos como Pompeya o Herculano, hasta la puesta en valor de las zonas mineras como recursos culturales y de difusión para la ciudadanía, como minas turísticas visitables.
En los últimos años la investigación en la provincia de Almería ha permitido localizar otros minados de época romana y aportar nuevos datos e información arqueológica del área de los complejos mineros de lapis specularis almerienses. Actualmente, la región de Almería cuenta con cuatro complejos mineros de lapis specularis, en la zona del Alquián en Almería capital, en Sorbas, en Arboleas y en Cuevas del Almanzora, que conforman un importante y valioso legado patrimonial y arqueológico de la profunda huella que la civilización romana dejó en estas tierras.