“LA FIESTA DEL MILENIO, SÓLO PARA VIPs Y SUSANA DÍAZ”, artículo de Miguel Cabrera en diario EL MUNDO
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La Junta cerró el miércoles la Alcazaba para un acto para 500 políticos y empresarios
Al acto ni siquiera fueron invitados colectivos creados expresamente para la efeméride‘
Desde Franco, la Alcazaba sólo se ha cerrado para Susana Díaz», dice el sindicato Ustea
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«Aunque las administraciones habían destacado que la celebración del Milenio de Almería estará abierta a la ciudadanía, la Junta de Andalucía cerró la noche del miércoles la Alcazaba de Almería y suspendió una actividad prevista que estaba abierta al público para celebrar en su lugar un acto privado -supuestamente el acto central de la conmemoración- al que solo pudieron acceder un selecto grupo de invitados, entre ellos la presidenta de la Junta, Susana Díaz.
Alrededor de 500 personas, en su mayor parte políticos, aunque también empresarios, representantes sindicales y otras autoridades provinciales acompañadas de sus respectivas parejas, pudieron escuchar en exclusiva, en el tercer recinto de la Alcazaba, un concierto del violinista Ara Malikian, para conmemorar el Milenio del Reino de Almería.
Curiosamente, a este acto central no fueron invitadas prácticamente ninguna de las organizaciones civiles que más han trabajado y aportado en los últimos meses para preparar las actividades que se desarrollarán a partir de ahora. Entre las ausencias más destacadas, por falta de invitación, estuvieron por ejemplo los miembros de la Plataforma de Amigos del Milenio, la Asociación de Amigos del Milenio y la Asociación de Amigos de la Alcazaba.
Blas Fuentes, presidente de la Asociación de Amigos del Milenio, se muestra más sorprendido que molesto por el hecho de que los organizadores del acto privado, «el Diario de Almería, del grupo Joly», no se haya acordado de quienes realmente han trabajado más por esta celebración «desde hace muchísimos meses». A su juicio «también es curioso que una empresa privada organice un acto de esta naturaleza, y más aún que no esté abierto a todos los ciudadanos».
Tampoco fueron invitados al acto destacados colaboradores de las actividades de la conmemoración, que reconocían también sentirse perplejos por el modo en que la Junta ha gestionado esta celebración para convertirla en privada. Entre ellos se encuentran, por ejemplo, el arqueólogo Lorenzo Cara y el profesor de árabe de la Universidad de Almería (Ual) Jorge Lirola. Este último se mostraba especialmente crítico con la organización y destacaba que al acto sí acudieron invitados responsables de la Ual como el vicerrector, José Guerrero, acompañado del posible candidato a rector y ex delegado provincial de la Junta Javier de las Nieves. Ambos llegaron a la Alcazaba en el coche oficial de la universidad, a pesar de que esta institución, como apunta Lirola, se ha negado a organizar un curso de verano sobre esta conmemoración.
A los pies de la Alcazaba se concentraron también cerca de un centenar de personas y trabajadores, pertenecientes a cinco colectivos distintos, para expresar sus protestas a la presidenta de la Junta de Andalucía, desde ecologistas para protestar por la ‘legalización’ del Algarrobico a miembros de Marea Amarilla, del comité de empresa del área de la Delegación provincial de Cultura, empleados de una residencia de mayores y los monitores escolares que pueden ir a la calle en los próximos meses.
Todos ellos pudieron presenciar la llegada de los invitados VIP, y cómo el recinto del principal monumento de Almería se cerraba a cal y canto para que pudieran asistir a su ‘fiesta’ privada. Militantes del sindicato Ustea comentaban que el precedente más inmediato de este acto son las galas nocturnas de la Alcazaba en los años 70, con todo el sabor de casposo franquismo y el clasismo de la época, y alguien llegó a comentar que «desde los tiempos de Franco, la Alcazaba sólo se ha cerrado para Susana Díaz».
El profesor Jorge Lirola cree ante estos hechos que «Susana Díaz y la Junta de Andalucía deberían dar explicaciones públicas de muchas cosas, como por ejemplo si tiene derecho a cerrar la Alcazaba, patrimonio público, para una celebración privada, con derecho de admisión».
«Más que de otro siglo, lo que ha hecho la presidenta de la Junta es de otro planeta. Del planeta de los que creen que están por encima de las personas normales, del común de la gente. De los que privatizan los espacios públicos, cerrándolos a los ciudadanos normales, para escenificar intereses privados confundiendo la política institucional con la partidista», dice un portavoz de Ustea»
Miguel Cabrera
«El mundo», 1 de agosto de 2014
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